El indicador ha registrado una media mensual del 2,2%, y tiene recorrido para llegar al 2,8%-3% en 2022, según Bankinter y Asufin

El euríbor a 12 meses ha cerrado septiembre con una subida de la media mensual récord... Y el mercado da por hecho de que va a seguir aumentando.
En concreto, el indicador de referencia para la mayoría de las hipotecas en España terminó el noveno mes del año con una media mensual provisional del 2,23%, prácticamente el doble que la de agosto (1,249%) y en máximos desde enero de 2009. Además, es la mayor subida que ha experimentado el euríbor en la historia.
Con esta media mensual, que el Banco de España debe confirmar en los próximos días, el índice encadenaría su sexto mes en positivo, después de que en abril entrase en terreno positivo por primera vez desde enero de 2016. Y seguirá encareciendo con fuerza las cuotas de las hipotecas variables que tengan revisión de condiciones.
Así, un hipotecado con un préstamo variable a 30 años de 150.000 euros y un diferencial del 0,99% + euríbor sufrirá un aumento de su cuota hipotecaria de alrededor de 200 euros, lo que equivale a un incremento de 2.400 euros anuales.
A la hora de determinar cuánto subirá la cuota mensual influyen factores como el importe de la hipoteca, el tipo de interés o el año en el que se firmó. Recordemos que la inmensa mayoría de las hipotecas variables que se firman en nuestro país utilizan el sistema de amortización “francés”, lo que signfica que durante los primeros años de vida del préstamo la mayoría de la cuota va destinada al pago de intereses y el resto al pago del principal, aunque esos factores se van invirtiendo a medida que pasan los años. Así, el impacto del encarecimiento del euríbor no es igual (ni siquiera parecido) en el caso de una hipoteca contratada en el año 2021 que si se contrató en 2005.
El rally que está registrando el euríbor en los últimos meses está directamente relacionado con el cambio de la política monetaria por parte del Banco Central Europeo (BCE), que en julio y septiembre ha subido los tipos de interés hasta situarlos en el 1,25%, en un intento por frenar la escalada de la inflación, que está en máximos en la eurozona. 
Y todo apunta a que el indicador hipotecario todavía no ha tocado techo, toda una señal de que el mercado anticipa más subidas del precio del dinero. La última predicción del departamento de análisis de Bankinter, sin ir más lejos, sitúa al euríbor en el 2,8% a final de año, lo que significa que todavía podrían seis décimas más desde los niveles actuales en el cuarto trimestre. De cara a 2023, el banco cree que el indicador podría situarse en torno al 3%, aunque en 2024 podría bajar hasta el 2,1%.
Para la asociación de usuarios financieros Asufin, el recorrido al alza podría ser incluso superior: estima que en diciembre podría alcanzar el 3% e insiste en que el euríbor ha pulverizado todas las previsiones. De hecho, en primavera ninguna firma de análisis esperaba que el indicador pudiera acercarse al 1% en 2022.
Esta subida inédita e imprevista del euríbor provocará, según la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), una merma de la demanda de vivienda, impulsada también por la menor capacidad adquisitiva de los hogares y la incertidumbre económica. Sin embargo, de momento no está sobre la mesa que se produzca un fuerte parón del mercado ni una nueva crisis inmobiliaria.