El Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital, a través del IDAE, lanza una línea de ayudas de 125 millones de euros para actuaciones integrales que deberán mejorar la calificación energética total del edificio.

ISOVER tiene todos sus productos incorporados en una aplicación en forma de Complemento integrado en CE3X que permite seleccionar los conjuntos de medidas de mejora más adecuados a cada proyecto.

''Las actuaciones de eficiencia energética provocan unos ahorros importantes en el consumo anual de energía de calefacción y aire acondicionado'' declara Julián Domínguez, Presidente de la Agencia para la Rehabilitación de Edificios (Rehare). Los expertos y los estudios coinciden en que gran parte del parque edificatorio español necesita ser rehabilitado ya que se encuentra en estado de ruina energética. El sector de la edificación se caracteriza por ser un importante consumidor de energía, acaparando cerca del 41% del consumo energético de Europa.

Conscientes de la situación, las instituciones públicas implementan planes para fomentar la mejora energética de los edificios, como el Plan PAREER II, desarrollado por el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital, a través del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), que lanza una línea de ayudas de 125 millones de euros para las actuaciones de mejora integral. Es una continuación del primer Plan PAREER, que cosechó muy buenos resultados y aporta algunas novedades entre las que cabe señalar que los beneficiarios podrán contar con un anticipo, de hasta el 40% de la ayuda concedida.

Existen varios tipos de actuaciones para la mejora de la eficiencia energética de los edificios y muchas de ellas están relacionadas con el aislamiento de la envolvente térmica de los inmuebles ya que, esta es una de las principales fuentes de pérdida de energía. Entre las múltiples soluciones de aislamiento para reducir este consumo energético destacan el aislamiento por el exterior (Fachada Ventilada y SATE), el aislamiento en cámara (Sistema INSUVER) y el aislamiento por el interior (trasdosado de PYL o instalación de doble hoja cerámica).

Podrán beneficiarse de las ayudas del programa los propietarios de edificios existentes destinados a cualquier uso, con personalidad jurídica pública o privada; las comunidades de propietarios o agrupaciones de comunidades de propietarios de edificios residenciales, constituidas como propiedad horizontal; las empresas explotadoras, arrendatarias o concesionarias de edificios; y las empresas de servicios energéticos. Otro requisito para acceder a ellas es que, al final de la obra, la calificación energética del edificio mejore en al menos una letra.

Para ello, el técnico proyectista habilitado, deberá de utilizar uno de los procedimientos reconocidos oficialmente para dicho fin. Actualmente, el programa reconocido por el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital y el Ministerio de Fomento para la certificación energética para edificios existentes, así como el más utilizado por los técnicos certificadores, es programa CE3X. ISOVER, haciendo uso de las más recientes tecnologías tiene todos sus productos integrados en una aplicación en forma de complemento que, integrándose en CE3X, permite seleccionar los conjuntos de medidas de mejora más realistas adecuados a cada proyecto. Los datos se devuelven en un completo informe totalmente detallado, que se puede utilizar para la justificación de la mejora de la calificación energética de las medidas propuestas.

Los interesados podrán solicitar las ayudas a través de la aplicación informática que lanzará el IDAE en su web, a partir del próximo 3 de febrero de 2018. En la misma página se pueden consultar de manera más detallada las bases y requisitos para beneficiarse.

La eficiencia energética en el sector residencial no es solo una oportunidad global que permitirá la reducción de la dependencia energética exterior como país, sino que representa también una oportunidad individual de cada familia, ya que según los datos publicados por el IDAE, el consumo energético medio por vivienda en España es del orden de 10.000 Kwh al año, lo que supone un importante esfuerzo económico, y el cual está sometido además a las fuertes fluctuaciones de los precios de los distintos tipos de energía, y que lleva a la aparición de situaciones de pobreza energética antes nunca vistas.